En esta entrada conocerás los nuevos parámetros de la presión arterial considerados ideales por la OMS (Organización Mundial de la Salud) para los adolescentes, adultos y ancianos.
Además, verás qué significa presión diastólica y sistólica, cuándo se considera hipertensión (presión alta) y cuándo es hipotensión (presión baja), entre muchas otras informaciones relevantes sobre este tema.
Sigue leyendo que te contaremos todo lo que necesitas saber sobre los niveles ideales de la presión arterial en esta guía completa.
¿Cuáles son los parámetros de la presión arterial considerados normales?
Está bien, pero, ¿cuáles son los valores de la presión normal?
Básicamente depende si la persona es considerada sana o si usa algún tipo de medicamento hipertensivo.
Veamos eso en detalle en los próximos apartados…
1. Adolescentes y adultos sanos
Los niveles de presión arterial para los adolescentes y adultos sanos se clasifican de la siguiente forma:
- Hipotensión (tensión baja) – La sistólica se encuentra por debajo de los 90 mmHg o la diastólica por debajo de los 60 mmHg.
- Presión arterial normal – La sistólica debe encontrarse por encima de los 90 y por debajo de los 120 mmHg; la diastólica, por encima de los 60 y por debajo de los 80 mmHg.
- Prehipertensión (tensión alta) – La sistólica está entre los 120 y 129 mmHg y la diastólica por debajo de los 80 mmHg.
- Hipertensión Fase 1 – La sistólica está entre los 130 y 139 mmHg o la diastólica entre los 80 y 89 mmHg.
- Hipertensión Fase 2 – La sistólica se encuentra entre los 140 y los 179 mmHg o la diastólica entre los 90 y los 119 mmHg.
- Crisis Hipertensiva – La sistólica se encuentra por encima de los 180 mmHg o la diastólica por encima de los 120 mmHg.
Estos valores se utilizan para efectuar un diagnóstico y clasificar la hipertensión.
2. Hipertensos que usan medicamentos
En pacientes hipertensos que hacen uso de medicamentos, los siguientes valores pueden ser considerados como meta:
- Adolescentes y adultos jóvenes – La presión debe ser inferior a 140/90 mmHg.
- Adultos con más de 60 años que no tengan diabetes o enfermedad renal crónica – La presión debe ser inferior a 150/90 mmHg.
- Adultos con más de 60 años que tengan diabetes y/o enfermedad renal crónica – La presión no puede ser superior a los 140/90 mmHg.
3. Valores de la presión arterial normal en los niños
Definir la presión ideal en los niños es una tarea muchísimo más compleja, pues depende del percentil (escala de 0 a 100) de la altura en que se encuentre.
Ve aquí dos ejemplos:
- un niño de 5 años con percentil 10 de altura, podría considerarse hipertenso si tuviera persistentemente valores de presión arterial superiores a 109/70 mmHg
- por su parte, otro niño de la misma edad, pero con percentil 90 de altura, debería tener valores superiores a 115/74 mmHg frecuentemente para ser diagnosticado con hipertensión.
Existen tablas que cuentan con los valores de presión arterial aceptables para los niños de acuerdo con su edad y los percentiles 5, 10, 25, 50, 75, 90 y 95 de altura.
En verdad son decenas de valores posibles, por lo que es imposible saberlos de memoria.
Luego de tomarle la presión a un niño, aún será necesario definir en qué percentil de altura está, para, por medio de la tabla, poder interpretar sus niveles.
Por ese motivo, únicamente un profesional de la salud tendrá la capacidad de hacerlo de manera confiable y determinar si un niño tiene o no hipertensión.
NO TE PIERDAS ESTO:
¿Por qué la presión arterial elevada es tan peligrosa?
Las arterias fueron programadas para funcionar dentro de ciertos valores.
Cuando se someten a niveles de presión demasiado elevados de forma prolongada, el exceso de fuerza sobre sus paredes puede ocasionar lesiones severas.
En estos casos, con frecuencia se forman pequeñas grietas en sus paredes, algo que favorece la ruptura de pequeños vasos sanguíneos.
Pero, además, en las arterias de mayor diámetro suelen formarse placas de calcio.
Dichas placas no solo reducen la elasticidad de las arterias, sino que también disminuyen su calibre interno, aumentando así el riesgo de oclusión de la circulación sanguínea por trombos (coágulos), un fenómeno conocido como trombosis.
Como si todo esto fuera poco, aparte del daño que provoca a los vasos sanguíneos, la presión arterial alta aumenta el trabajo del corazón, que se ve obligado a bombear la sangre con más fuerza, para contrarrestar la mayor resistencia.
La hipertensión arterial es considerada por los médicos como el factor de riesgo más común de las enfermedades cardiovasculares y los accidentes cerebrovasculares (ACV).
Por otro lado, la presión elevada también es responsable de otros problemas graves, tales como la insuficiencia renal crónica, los aneurismas y las lesiones en los vasos sanguíneos oculares.
Pero aparte de todas estas posibles complicaciones, la hipertensión tiene un problema gravísimo: se trata de una enfermedad silenciosa que en la mayoría de los casos no causa síntomas.
Por ese motivo, solo hay una manera de saber con precisión si una persona es hipertensa: medir su presión arterial de forma periódica.
¿Qué significa hipertensión arterial?
En la actualidad, la hipertensión afecta a aproximadamente al 20% de la población mundial. Son millones de personas con sus niveles de presión arterial por encima de lo considerado normal.
Entre los ancianos, esta es una condición mucho más frecuente y está presente en más del 50% de los mismos.
La tensión arterial es la presión ejercida por la sangre sobre las paredes de nuestras arterias.
Hagamos una analogía: imagínate a una manguera vacía…
Al abrir la canilla, la presión interna de la manguera se eleva y sus paredes se estiran.
Como se trata de un sistema abierto, por más que abras el grifo, el agua saliendo en el otro extremo evita que la presión dentro de la manguera suba demasiado.
Sin embargo, el sistema circulatorio en el cuerpo humano es cerrado.
En teoría, los vasos sanguíneos son autorregulables, es decir, normalmente se comprimen o dilatan según el volumen de sangre circulante con la finalidad de mantener la presión arterial más o menos constante.
Si el volumen de sangre se reduce un poco, los vasos se comprimen (vasoconstricción);
Por el contrario, si el volumen sanguíneo aumenta, los vasos se dilatan (vasodilatación).
– Todo tiene un límite…
Por supuesto que para esto hay un límite: si el volumen de sangre disminuye o aumenta demasiado, las arterias no serán capaces de mantener la presión en un nivel adecuado, por más que se compriman o dilaten.
Con esta información, ya podemos entender que una de las causas de la hipertensión arterial es el aumento excesivo del volumen sanguíneo dentro de los vasos.
Este exceso por lo general ocurre cuando el cuerpo retiene mucha agua, en ocasiones por el exceso de sal (sodio).
Pero lo increíble es que la mayor parte de los pacientes hipertensos no tienen tanto exceso de líquidos en su cuerpo como para que la capacidad de dilatación de los vasos se agote.
Lo que sucede en realidad es un fallo en la capacidad de autorregulación de las arterias: se comprimen más de lo necesario para que la presión se normalice.
– Factores que causan la pérdida de autorregulación de las arterias
El origen de la pérdida de esta capacidad de autorregulación (que lleva a la hipertensión), es bastante complejo y aún no es totalmente comprendido.
Pero lo que sí se sabe es que envuelve ciertos factores, entre los mismos:
- la genética,
- la capacidad que tienen los riñones para hacer frente al volumen de agua corporal,
- la cantidad de sodio en el cuerpo,
- la producción de hormonas que actúan sobre la pared de los vasos sanguíneos,
- la propia salud de las arterias, que precisan ser capaces de contraerse y dilatarse de forma apropiada.
Cuanto menor sea la capacidad que tengan los vasos de autorregularse según el volumen de sangre en circulación, más alto será el riesgo de desarrollar hipertensión.
Los casos considerados más graves, por lo general son aquéllos en que el paciente tiene un exceso de volumen de sangre y además sus vasos son incapaces de dilatarse lo suficiente para soportar una presión más alta sobre sus paredes.
¿Qué es presión arterial sistólica y diastólica?
Para entender este concepto, primero precisamos conocer cómo se describen los valores de la presión arterial.
¿Qué significa por ejemplo que un paciente está con una presión arterial de 120/80 mmHg?
Por medio de los latidos, el corazón bombea la sangre: al contraerse, expulsa la sangre hacia el interior de los vasos y, al relajarse, se llena de sangre nuevamente.
Esta alternancia se produce de 60 a 100 veces por minuto en promedio. El corazón se llena de sangre y se vacía… se llena y se vacía de nuevo…
La presión en las arterias aumenta en la fase de contracción y luego disminuye en la de relajación.
- La contracción del músculo cardíaco se denomina «sístole». En consecuencia, la presión arterial sistólica es aquélla que se produce durante esta fase.
- Por otra parte, la relajación del músculo cardíaco es denominada «diástole». Por lo tanto, la presión arterial diastólica es la que se produce durante dicha fase.
La presión arterial llega a su valor más alto durante la sístole y el más bajo durante la diástole, algo que también se conoce como presión máxima (la de arriba) y presión mínima (la de abajo).
La tensión es medida en milímetros de mercurio (mmHg).
Eso significa que, si un paciente está con una presión arterial de 120/80 mmHg, la presión máxima en la pared de la arteria (producida durante la sístole) es 120 mmHg y la mínima (producida durante la diástole) es 80 mmHg.
La mayoría de las personas dice 12/8 (12 por 8), pero la forma correcta es 120/80 (120 por 80), pues esa es la real presión en milímetros de mercurio.
En resumen, para que te quede más claro:
- La presión sistólica (SYS) es la que conocemos como «la de arriba» y corresponde a cuando el corazón late y bombea la sangre.
- La diastólica (DIA) es «la de abajo», cuando el corazón no está bombeando, es decir, entre los latidos.
¿Qué es hipertensión arterial? (Vídeo)
En este vídeo, el Dr. Luis Alfonso Medina Ochoa, médico internista, nos explica qué es la hipertensión y responde varias preguntas relacionadas a este tema fundamental para la salud:
Preguntas Frecuentes
- ¿Qué factores pueden afectar las lecturas de la presión arterial?
Varias cosas pueden influir en las lecturas de la presión arterial, incluyendo el estrés, el consumo de sal, la cafeína, la actividad física reciente y la postura en la que se mide. También es importante medirla en un ambiente tranquilo y en condiciones consistentes para obtener resultados precisos.
- ¿Con qué frecuencia debo controlar mi presión sanguínea?
La frecuencia con la que debes monitorear tu presión arterial depende de tu salud general y de las recomendaciones de tu médico. En general, si tienes hipertensión o estás en riesgo, se recomienda medirla regularmente, como una vez al día o varias veces a la semana.
- ¿Cuándo debo consultar a un médico sobre mi presión arterial?
Debes consultar a un médico si tus lecturas de presión arterial son consistentemente altas, si experimentas síntomas relacionados con la hipertensión o si estás preocupado por tu salud cardiovascular. Es importante buscar orientación médica para recibir un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado.
- ¿Cuál es la relación entre la presión arterial y la salud del corazón?
La presión arterial alta puede dañar las arterias y el corazón con el tiempo, aumentando el riesgo de enfermedades cardíacas como ataques al corazón y accidentes cerebrovasculares. Mantener una presión arterial dentro de los rangos saludables es esencial para proteger la salud cardiovascular a largo plazo.
- ¿Qué papel juegan los medicamentos en el control de la presión arterial?
Los medicamentos para la presión arterial, como los inhibidores de la ECA, los bloqueadores de los canales de calcio y los diuréticos, ayudan a reducir la presión arterial al relajar los vasos sanguíneos, reducir el volumen de sangre o hacer que el cuerpo elimine exceso de sodio y agua.
Más informaciones importantes
Recomendamos que veas también las siguientes entradas:
Esperamos que estas informaciones sobre los parámetros de la tensión o presión arterial (TA o PA) y la tabla actualizada con las categorías de la presión de la Asociación Americana del Corazón te sean bastante útiles.
Muchas gracias por tu visita y, si lo deseas, déjanos tus comentarios o preguntas relacionadas más abajo.
¿TE GUSTÓ? AYÚDANOS A QUE LLEGUE A MÁS PERSONAS:
OTRAS PERSONAS ESTÁN VIENDO:
SOBRE EL AUTOR:
Puedes ver su biografía pulsando aquí.
Buenos días, consulté su artículo para un trabajo escolar, me gustaría saber la vigencia de esta información (en cuanto a clasificaciones). Muchas gracias.
Buenos días Sofía,
La información es actual.
Un saludo.